¿De qué va Antifrágil?
«Esto hace de este libro mi obra principal. Solo he tenido una idea fundamental que he ido desarrollando paso a paso, aunque el último paso – este libro (Antifrágil) – es más bien un gran salto.»
N. N. Taleb sobre Antifrágil.
Antifrágil resume las ideas de los dos primeros libros de su colección Incerto: ¿Existe la suerte? y Cisne Negro; y propone una solución a este mundo de azar: la Antifragilidad.
Es una realidad que el mundo está lleno de azar. De hecho, existen sucesos imprevisibles con unas consecuencias de gran alcance: los Cisnes Negros. Si aceptamos el azar y la complejidad del mundo, la mejor alternativa que nos encontramos es desarrollar la antifragilidad, en nosotros mismos, en nuestros proyectos e incluso en nuestras relaciones.
Un libro denso y complicado, pero que resume a la perfección el pensamiento de este polémico autor. Vamos con las tres ideas que más te pueden servir de Antifrágil.
¿Qué es la antifragilidad? y los errores que necesitas en tu vida
No puedes predecir lo que va a pasar pero puedes prepararte para ello.
La hidra de Lerna representa la antifragilidad, cada vez que recibe daño (se le corta una cabeza) se beneficia (le salen dos).
El Ave fénix, en cambio, cada vez que muere renace de sus cenizas y punto. Esta criatura mitológica es robusta. Después del daño, se queda como está.
El tercer grupo, sería el de las cosas frágiles, aquellas que sufren frente al estrés.
Para empezar en este camino de la antifragilidad debemos sufrir un daño mínimo: ayunos cortos, entrenamientos de fuerza, carreras… etc.
Esta idea puede resumirse en: ingenium mala saepe movent. El genio surge de la dificultad, o como dice el dicho:
«El hambre agudiza el ingenio.«
¿Qué tipos de estresores y errores podemos «permitirnos» para ser antifrágiles? Debemos entender que existen dos tipos de estresores: los agudos y los crónicos.
Los agudos, ocurren en un momento puntual y desaparecen, dejando después tiempo para progresar. En estos, se da el fenómeno de sobrecompensación. Tras un tiempo de descanso, aumentan nuestras capacidades para tolerarlo.
Los crónicos te debilitan poco a poco pero no dejan pie a la sobrecompensación, ya que se mantienen en el tiempo. Estos estresores nos dañan pero no nos dejan tiempo para recuperar y acaban perjudicándonos. Los errores son algo parecidos.
Los errores parciales, son aquellos de los que nos podemos recuperar.
Los errores graves en cambio, son aquellos que destruyen por completo el sistema, la relación o el proyecto al que afectan. Los primeros nos mejoran, los segundos acaban con nosotros.
La conclusión buscar estresores agudos y errores parciales que, sin acabar contigo, te permitan mejorar.
Pruebas, causalidad y experiencia: el pavo de Taleb
¿Ausencia de prueba o prueba de ausencia? Esta comparación provocó en mí una gran confusión. Taleb lo explica con la historia del pavo, que hace mucho más entendible estos conceptos algo más enrevesados.
Antes de entrar en la historia debemos entender que:
- La ausencia de prueba viene a decirnos que no existen pruebas de un suceso.
- La prueba de ausencia significa que podemos probar que un suceso no va a ocurrir.
Si te paras a pensarlo son cosas completamente distintas.
Un pavo es alimentado por un carnicero durante mil días. Cada día, el carnicero da de comer al pavo. El pavo piensa que al carnicero le encantan los pavos y está encantado con su vida.
El día antes de Acción de Gracias, ser pavo deja de ser tan buena idea.
Cuando parece que la vida del pavo es tranquila porque no hay indicios de que le vaya a pasar nada (ausencia de prueba), el carnicero hará lo propio para que su familia coma el día de acción de gracias.
El pavo confundió la ausencia de prueba con la prueba de ausencia, pensando que por haber sido alimentado durante toda su vida, todo seguiría igual. La historia ya sabes como acaba.
Esto tiene mucho que ver con la falacia ad ignorantium. Defendemos algo porque no existe prueba de lo contrario. Es decir, utilizamos la falta de pruebas (ausencia de prueba) como prueba de que ese suceso no ocurrirá (prueba de ausencia).
Moraleja: no seas pavo.
Que no tengas pruebas de algo, no significa que no pueda suceder.
Las asimetrías
¿Qué es una asimetría?
Algo es simétrico cuando podemos dividirlo en dos partes iguales. Hablando de resultados, obtenemos lo mismo si perdemos, que si ganamos. La asimetría es lo contrario, beneficios y pérdidas no son iguales.
Para Taleb, debemos buscar asimetrías que nos beneficien: las que tienen más posibles ganancias que pérdidas. Lo ideal es limitar los resultados negativos y buscar beneficios ilimitados.
Si algo es frágil la amenaza de que se rompa hace que todo lo que hagamos para mejorarlo o hacerlo eficiente sea inútil. La supervivencia va antes que la optimización, aunque a veces se nos olvide.
¿Cómo podemos ganar siempre?
Si no tienes nada que perder, todo es ganancia. Hasta aquí nada nuevo. El problema es que la mayoría tenemos algo que perder. Somos frágiles.
El estoicismo, en concreto Séneca, nos propone un remedio frente a esto: dar las cosas por perdidas. Cuando todo va bien es cuando esta práctica es más complicada, pero también es cuando más falta hace. Si no tenemos nada que perder, todo es ganancia.
Conociendo al autor de Antifrágil
Nassim Taleb es un tipo único. Inversor, escritor y filósofo, ha dedicado gran parte de su vida a tratar de explicar y entender la incertidumbre.
De carácter arrogante, Taleb es partidario de aprender bajo la experiencia y rechaza el intento de la sociedad de racionalizar todo.
Este pensador libanés tiene ideas contrarias a lo establecido y se ha ganado numerosos y poderosos enemigos por sus criticas hacia la Política, la Economía y el sector bancario.
Su colección Incerto, aunque compleja en ocasiones, te ofrecerá un punto distinto del mundo. Esta colección está compuesta por las obras de : ¿Existe la suerte? , Cisne Negro, Antifrágil, Jugarse la piel y El lecho de Procuso.